En las entrañas de nuestro país existen tesoros acuíferos que, con su belleza y diversidad, enamoran a cualquier viajero. Además del atractivo turístico, los lagos y lagunas de México juegan un papel crucial en el equilibrio ambiental y el suministro de recursos naturales y económicos. Razones suficientes para practicar el turismo sustentable que evita el desgaste y daño de estas reservas naturales, que ofrecen actividades para todas las personas y que en cada estación del año cobran una belleza particular.
Además de las especies endémicas de cada destino, su historia, cultura y pobladores crean una experiencia magnífica y acogedora. Estos son algunos de los lagos y lagunas más importantes de México.
Laguna de Miramar
Este tesoro se encuentra en la Selva Lacandona, en Chiapas. Gracias a un acuerdo entre los pueblos cercanos, los alrededores de la Laguna de Miramar aún están libres de construcciones, por lo que este cuerpo de agua conserva sus tonos verde y azul y mantiene intactas su flora y fauna. Ahí abunda una gran variedad de animales silvestres como tortugas, cocodrilos, monos y tucanes. Muy cerca de este lago es posible observar pinturas rupestres, realizar recorridos a caballo o en bicicleta y hacer senderismo. La laguna puede ser recorrida en canoa.
Lago de Arareco
A solo cinco kilómetros del pueblo de Creel, en Chihuahua, se encuentra uno de los rincones más hermosos de la Sierra Tarahumara, el Lago de Arareco, que se caracteriza por su paisaje boscoso y abundante fauna de aves y criaturas terrestres. Este lago es una suerte de atmósfera mágica.
El lugar es operado por las comunidades tarahumaras y las actividades disponibles dependen de la época del año en que lo visites. Se pueden rentar cabañas; además, ofrecen recorridos a caballo y en lancha, práctica de pesca, nado, esquí acuático y ciclismo de montaña. Este uno de los pocos lagos mexicanos donde es posible disfrutar de un paisaje lleno de nieve durante el invierno.
Laguna de Yuriria
Esta laguna se encuentra en el Pueblo Mágico del mismo nombre, Yuriria, en el estado de Guanajuato. Su nombre se debe a la leyenda purépecha que cuenta que cada vez que ocurría una desgracia en el pueblo, la laguna se pintaba de color rojizo, como la sangre. La realidad es que los bellos colores de sus aguas son producto de la iluminación del sol. La Laguna Yuriria puede ser recorrida en lancha y en ella está permitida la práctica de pesca. Para los amantes de la naturaleza, este es un lugar ideal, pues en los alrededores habitan diferentes especies de animales como zorrillos, coyotes, alicantes y tlacuaches.
Lagunas del Sol y La Luna
Poner en la cita: foto de Rincones de México
Este par de lagunas se encuentra en el cráter del Nevado de Toluca, en el Estado de México. El mayor atractivo de este destino es el placer visual; debido a las bajas temperaturas no está permitida la práctica de actividades acuáticas. Aun así, visitar ambas lagunas es un goce total. Su peculiar ubicación en el corazón del volcán Xinantécatl y el contraste de sus aguas verde-azules cristalinas con la nieve que recubre las cimas en invierno regalan unos paisajes majestosos.
Lago de Camécuaro
En el municipio de Tangancícuaro, Michoacán, se localiza el Lago de Camécuaro, reconocido no solo por las leyendas purépechas que se cuentan sobre el origen del lugar sino por sus aguas cristalinas de color esmeralda, rodeadas de ahuehuetes y fresnos, que crean un paisaje de fantasía. Aunque el lago es frío, es posible nadar y bucear en él, así como acampar a sus orillas para observar la noche estrellada. También está la opción de recorrer el Parque Nacional Lago de Camécuaro en bicicleta o en lancha.
Lago de Chapala
Entre los estados de Jalisco y Michoacán se encuentra el Lago de Chapala, el más extenso de México, con 1,112 kilómetros cuadrados. Además de su importancia como el mayor suministro de agua dulce para Guadalajara, su valor turístico es inmenso. Las comunidades junto a este enorme cuerpo acuático tienen grandes ofertas recreativas, como las actividades dentro del lago, visitas en lancha a sus islas, donde es posible entrar en contacto con la cultura huichola, y el recorrido por el malecón para observar el hermoso reflejo de las montañas sobre el espejo de agua.