El pasado 6 de febrero dos sismos afectaron Turquía y Siria provocando el derrumbe de más de 6 mil edificios y la muerte de, hasta el momento, más de 12 mil personas.
México cuenta con una gran tradición de ayuda internacional en casos de desastres.
Por esta razón, México envió un equipo de rescatistas que ayudarán en los trabajos de emergencia en Turquía.
El canciller Marcelo Ebrard confirmó que una aeronave de la Fuerza Aérea Mexicana aterrizó en la provincia de Adana, donde iniciaría su travesía.
En total se trata de 150 elementos, compuestos por personal de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), Marina (Semar), Relaciones Exteriores (SRE) y de la Cruz Roja Mexicana.
Entre los equipos enviados se encuentran también 16 binomios caninos que serán fundamentales para las operaciones de rescate.
Dichos binomios cuentan con entrenamiento especial para atender emergencias y se especializan en rescate de personas.
El funcionario mexicano también indicó que brigadas de Topos se trasladarán a la zona para apoyar también en las labores.
Diariamente, se suman rescatistas de todo el mundo en una lucha contrarreloj por localizar a personas que pudieran haber quedado entre los escombros y permanezcan con vida.
Las labores se han dificultado debido a la magnitud de la emergencia y a las gélidas temperaturas que se registran en la zona que provocan nevadas.
Otro de los factores que complican la atención es que continúan las réplicas a lo largo de toda la región afectada.
De acuerdo con integrantes del grupo de rescatistas Cascos Blancos, la cifra de víctimas podría aumentar dramáticamente en las próximas horas.