La miel de la abeja melipona es la más importante y valorada en la Península de Yucatán.
La abeja melipona es una especie sin aguijón que cultivan los pueblos mayas desde hace cientos de años y la denominan abeja sagrada maya debido a las propiedades curativas que tiene su miel.
Pero la importancia de esta miel se remonta a la época prehispánica, cuando los mayas realizaban en su honor entre cuatro y seis ceremonias al año.
La principal característica de la abeja melipona está en que no tiene aguijón, pero para defender a su colonia muerde lo que signifique una amenaza.
Es tal su grado de ataque que suele morir durante el combate.
Gracias a la miel de las meliponas se elaboran productos como la miel, propóleo, cera y polen.
Una colmena de melipona produce litro y medio de miel al año y su proceso de producción es más lento en comparación con las abejas europeas que producen hasta 30 litros al año.
Aunque la producción de miel es menor, esta es más beneficiosa que la miel de otras abejas pues se le atribuyen propiedades medicinales que favorecen al sistema inmunológico.
Se utiliza también para curar dolores, heridas, quemaduras y enfermedades.
En la rama cosmética sirve para la producción de jabones, cremas y talcos.
Además, como polinizadoras se les atribuye la producción de cultivos como el achiote, aguacate, café, calabaza, chayote, chile habanero, mango, pepino, sandía, tomate entre otros.
Sin duda las abejas meliponas son una joya de la fauna de la Península de Yucatán.