Aunque en el inicio de la historia de Qatar este país jugó un papel secundario, con el paso de los años se ha convertido en una nación vital y muy próspera.
Durante siglos, su posición geográfica, lo llevó a convertirse en un paso obligado para quienes comerciaban diversos productos como pigmentos, telas y perlas.
Estas actividades convirtieron a Qatar en un país determinante en Medio Oriente.
Los comerciantes, que navegaban el Golfo Pérsico desde y hasta Europa, lo convirtieron en su centro de operaciones por ser la primera tierra que podían pisar.
Debido a la gran actividad económica, Qatar estuvo, durante distintos de la historia, bajo el dominio de grupos que se disputaban la posibilidad de tener la primera entrada a tierra firme.
En el siglo 19, la familia Thani logró mantener el control sobre la región aunque poco después, cayó bajo el imperio Otomano.
Sin embargo, al estar lejos del centro de la influencia del poder del imperio en Anatolia, la península cayó ante Reino Unido.
Durante la década de 1930 comenzó el descubrimiento de yacimientos petroleros en la zona.
Esto dio lugar a la modernización del país y abrió la puerta a la prosperidad de la que goza hasta ahora.
La explotación del petróleo y del gas sustituyeron al comercio como la principal actividad económica en el país.
En 1971, Qatar se independizó de Reino Unido y fue gobernado por el emir Khalifa bin Hamad Al Thani quien posteriormente fue derrocado por su hijo, Hamad bin Khalifa Al Thani.
Precisamente durante el reinado de este último, el país comenzó su desarrollo.
Desde 2013 con la llegada al trono de Tamim bin Hamad Al Thani, Qatar se consolidó como un país clave en la región y se erigió como la nación más rica del mundo.
Pese a algunas tensiones políticas con sus vecinos, pese a su tamaño, Qatar se ha convertido en una de las naciones más prósperas y, con la llegada del Mundial de Futbol, busca concretar su posición de liderazgo a nivel internacional.