El Día de Muertos es una de las celebraciones más importantes de la cultura mexicana y guarda un profundo significado al recibir de nuevo a quienes han muerto.
Su conmemoración es parte del sincretismo de los mexicanos y tiene diversas representaciones a lo largo del territorio nacional.
Aquí hay algunas sugerencias de estados en los que esta fecha se convierte en un momento muy especial y único.
Michoacán
Michoacán destaca por la forma en que se conmemora la vida después de la muerte.
En diversas regiones del estado se realizan conmemoraciones rituales en las que se organizan recorridos, visitas a panteones y procesiones.
No se puede dejar de visitar Pátzcuaro, Janitzio, Tzintzuntzan, San Juan Parangaricutiro, Santa Fe de la Laguna o Cuanajo por la espectacularidad de los festejos.
Ciudad de México
La Ciudad de México es también es uno de los lugares en los que el Día de Muertos tiene un lugar importante.
Destacan las ofrendas monumentales ubicadas en el Zócalo, el desfile de catrinas y numerosas fiestas y festivales a lo largo de las 16 alcaldías donde también los niños salen a pedir la tradicional “calaverita”.
Sin embargo, en el pueblo de MIxquic, en la alcaldía Tláhuac, esta celebración cobra especial significado por el fervor con el que los habitantes acuden a los panteones y realizan la “alumbrada” para iluminar el camino para las almas de los muertos.
Estado de México
En este estado cobra singular importancia la colocación de grandes altares de Día de Muertos en las casas en los que se pone comida, chocolate y panes especialmente elaborados para la ocasión.
También se organizan recorridos de Catrinas, el Festival de la Almas y recorridos temáticos por la festividad en los municipios de Toluca, Tepoztlán, Teotihuacán y Valle de Bravo.
Guerrero
En la Costa Chica de Guerrero esta festividad es celebrada con un baile de diablos, llamada ‘Juego de los Diablos’ en la que los participantes brincan y bailan por las calles durante tres días.
Una de las características de esta danza está en las máscaras de diablos que se elaboran de cartón, crines de caballo, piel y hasta cuernos que son realizadas de manera personal por cada danzante.
Yucatán
Conocida como Hanal Pixán, principalmente en la Península de Yucatán pero también en Campeche, la comida de las ánimas es una de las fiestas más esperadas por la población de esta parte del país.
Para la celebración se preparan platillos especiales como el pib o el pibipollo, platillos reconocidos por su compleja elaboración que incluye su cocción bajo tierra.
Campeche
En el municipio de Hecelchakán se observan tradiciones muy especiales relativas al Hanal Pixán.
Días previos a la llegada de la fecha, familiares de difuntos acuden al panteón a limpiar los restos óseos de quienes se han ido, en una festividad conocida en maya como Kesh Lu Noc Ba’ac en la que se demuestra el amor y el respeto por los muertos.