Alerta en el mundo por nueva variante de coronavirus

Alerta en el mundo por nueva variante de coronavirus. Foto de Mufid Majnun

El pasado 25 de noviembre, la Plataforma de Innovación en Investigación y Secuenciación de KwaZulu-Natal en Sudáfrica confirmó el descubrimiento de una nueva variante de coronavirus que fue identificada como B.1.1.529. 

Más tarde, la Organización Mundial de la Salud (OMS) la denominó ómicron, debido a que es la siguiente letra del alfabeto griego, y fue descrita como una inusual suma de mutaciones. 

Hasta el momento, debido a que las investigaciones están en una fase muy temprana, se desconoce cuál será su impacto. 

Su comportamiento parece indicar que es más transmisible que cualquier variante que se haya presentado hasta el momento, aunque los estudios completos para determinar esto aún están en desarrollo. 

El Instituto Nacional de Enfermedades Infecciosas de Sudáfrica señaló que, la evaluación parcial indica que es probable que las vacunas ofrezcan protección para formas graves de la enfermedad como las que requieren hospitalización. 

Desde su descubrimiento, la variante ómicron ha sido detectada en 10 países y, aunque en un inicio se reportaron 22 casos, rápidamente, aumentaron a más de 100. 

La indicación de que la variante ómicron podría ser más transmisible e incluso que podría ser inmune a las vacunas, provocó una ola de restricciones aéreas en varios países, principalmente en el continente africano. 

En México hasta este 29 de noviembre, no ha sido detectado ningún caso de esta variante aunque las autoridades de Salud indicaron que modificaron sus protocolos para la detección de casos. 

La Ciudad de México también aplica una vigilancia especial para la detección de esta nueva variante, aunque las autoridades locales confirmaron que la dominante en la capital es la delta.

Lucha contra contaminación del aire combate cambio climático

Luchar contra contaminación del aire combate cambio climático. Foto de Paul Gilmore para Unsplash

El director general de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Tedros Adhanom Ghebreyesus, aseguró que mejorar la calidad del aire es también una forma de luchar contra el cambio climático

El máximo dirigente de la OMS detalló que inhalar aire contaminado incrementa el riesgo de sufrir enfermedades respiratorias como neumonía, asma o enfermedad pulmonar obstructiva crónica además de incrementar el riesgo de contraer formas graves de COVID-19. 

Según la OMS, la contaminación del aire es, junto al calentamiento global, una de las mayores amenazas a la salud del hombre por lo que, mejorar la calidad del aire puede ayudar a los esfuerzos de mitigación del cambio climático. 

Apuntó que la calidad del aire puede mejorarse reduciendo emisiones de gases de efecto invernadero

Para la población en general, se recomendaron simples gestos como el mayor uso del transporte público o preferir energías limpias en la cocina o los sistemas de calefacción o enfriamiento. 

La Organización indicó que la reducción de la contaminación no es fácil en un planeta donde 90 por ciento de la población vive con exceso de contaminación en la atmósfera pero es un cambio que, empezando por los asuntos del día a día puede lograrse. 

Un tercio de países del mundo sin regulación sobre calidad del aire

Un tercio de países del mundo sin regulación sobre calidad del aire. Foto de Photoholgic para Unsplash

El Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA) dio a conocer que un tercio de los países en el mundo carece de los estándares de calidad del aire que exigen las leyes que regulan este tema. 

De acuerdo con la primera evaluación de las leyes y regulaciones sobre calidad del aire en el mundo, elaborada por el PNUMA, en las zonas en las que existen este tipo de directrices, los estándares varían ampliamente y, por lo general, no se ajustan a los requerimientos de la Organización Mundial de la Salud (OMS). 

Entre los resultados de la evaluación, destaca que al menos 31% de los países que tienen el poder para aplicar este tipo de regulación no la adoptan. 

La OMS ha presentado directrices de referencia para la calidad del aire ambiental, pero, como encontró el informe, no existe una alineación global ni un marco legal común para aplicarlos.

Además, se encontró que 92% de la población mundial vive en lugares donde los niveles de contaminación del aire exceden los límites seguros, principalmente en países pobres.

En al menos 34% de los países, la calidad del aire en exteriores aún no está protegida legalmente

Incluso cuando los estándares se adoptan de forma legal, son difíciles de comparar: 49% de los países definen la contaminación del aire exclusivamente como una amenaza al aire libre, la cobertura geográfica de los estándares varía y más de la mitad de los países permiten desviaciones de estos estándares.

El PNUMA detalló que planifica el apoyo técnico directo a los países, lo cual incluye el desarrollo y la implementación de marcos legales para la contaminación del aire, y la creación de capacidades para partes interesadas, incluidos jueces, fiscales y otros funcionarios encargados de hacer cumplir la ley.