África es una de las zonas más vulnerables ante el cambio climático y sus glaciares no quedan fuera.
La agencia de meteorología de la ONU alertó por la “vulnerabilidad desproporcionada” de la zona ante el alza de las temperaturas.
Entre estas alertas está el derretimiento de los últimos glaciares africanos, el cual, de acuerdo con las proyecciones, ocurrirá en 2040.
Con información recabada en 2020, se pudo establecer que los indicadores climáticos en África muestran que el incremento de las temperaturas continuó seguido del incremento del nivel del mal y de eventos climáticos extremos.
Pese a que solo el 4% de las emisiones de gases efecto invernadero del mundo las aporta África, la ONU detalló que la región ya sufre el impacto del cambio climático.
De acuerdo con el organismo meteorológico, la rápida disminución del tamaño de los últimos glaciares que quedan en África oriental, que se espera que se derritan completamente en un futuro cercano, muestra la amenaza de un inminente e irreversible cambio en el sistema de la Tierra.
Estos problemas climáticos también afectan cada vez a un mayor número de personas dejando a su paso pobreza, inseguridad alimentaria y desplazamientos forzosos.
Debido a esto, se hizo un llamado a proteger a la población y estar preparados para, en los próximos años, enfrentar sequías, inundaciones y calor extremo.