El aumento de las temperaturas derivado del cambio climático incrementará la mortalidad en Europa a mediados de este siglo si no se aplican desde ahora medidas severas de mitigación.
De acuerdo con un estudio del Instituto de Salud Global de Barcelona, el número de muertes por calor superará en las próximas décadas la mortalidad por frío en zonas del Mediterráneo.
El estudio señala que, entre 1998 y 2012, se encontró que más del 7% del total de muertes registradas en dieciséis países de Europa se atribuyó a la temperatura.
En dicho lapso, las temperaturas bajas fueron hasta diez veces más letales que las cálidas.
Pero esta proyección también señala que, en caso de no aplicar medidas urgentes, la tendencia se revertirá a mediados del siglo.
Los datos revelan que, a partir de la segunda mitad del siglo, el incremento en las temperaturas será muy pronunciado. Esto se relaciona directamente con las emisiones de gases de efecto invernadero.
La incidencia del calentamiento global es un fenómeno desigual y, en el caso de Europa, la región del Mediterráneo es más propensa a las altas temperaturas.
El estudio concluye que un factor relevante será la adaptación a nuevos escenarios, misma que ya contribuye a reducir la vulnerabilidad frente a las temperaturas pero que tarda en desarrollarse en los individuos.
Así, el llamado de los especialistas es a adoptar medidas globales para combatir el cambio climático que no sean regionales, pues si se adoptan por países o zonas no resultarán efectivas.