Autoridades de California confirmaron que gracias a lo cambiante de los vientos y al incremento de la humedad los bomberos han podido avanzar en controlar un incendio de grandes dimensiones en las montañas de Big Sur.
De acuerdo con los últimos reportes, hasta el momento, el incendio está contenido un 50 % aunque el peligro continúa latente.
El Departamento Forestal y de Protección contra Incendios de California confirmó que las llamas iniciaron el 21 de enero por la noche favorecidas por los vientos secos en el mar que provocaron ráfagas.
Sin embargo, con el paso de los días, la condición de los vientos ha disminuido además de que han cambiado de dirección.
En el más reciente mapeo mejorado que las autoridades realizaron de la zona, descubrieron que el incendio ahora afecta a 283 hectáreas, una disminución considerable desde su inicio.
Las llamas obligaron al desalojo de cuentos de residentes en el área poblada al sur de San Francisco y provocaron el cierre de la carretera principal de Big Sur.
En un inicio, el incendio se extendió hacia el mar y los equipos de emergencia se encargaron de contenerlo y evitar su propagación.
Las causas del incendio aún se encuentran bajo investigación.
