Autoridades confirmaron la muerte de una persona de 60 años en el estado de Queensland, Australia, debido a las intensas lluvias que azotan la zona.
El cuerpo de una mujer, que se cree que tenía cerca de 60 años, fue encontrado en el interior de Sunshine Coast después de que su automóvil fuera arrastrado por las aguas.
El temporal, que duró más de 24 horas continuas, obligó al cierre de carreteras y generó un caos vial.
Servicios de emergencia tuvieron al menos 100 llamadas de auxilio y equipos de rescate acuático acudieron a atender a pobladores que quedaron atrapados en las inundaciones.
Hasta el momento se han reportado unas 10 personas desaparecidas y 15 presas se encuentran a su máxima capacidad.
Se pidió a los residentes que estén en alerta máxima pues es probable que se produzcan inundaciones repentinas en caso de que haya nuevamente lluvias.
La policía pidió a los automovilistas mantenerse alejados de las carreteras pues tanto puentes como vías fluviales pueden volverse «mortales para cruzar».
A principios de febrero, una fuerte inundación ya había dañado parte interior en Australia afectando a más de 2 mil 500 personas.
Las fuerzas de defensa de ese país, entregaron más de 20 toneladas de alimentos y productos esenciales a través de operativos especiales de evacuación.
Las inundaciones hicieron tangibles los problemas de conexión terrestre que existen en el continente debido a la dificultad de los pobladores de trasladarse.
En los últimos años, las intensas lluvias han provocado enormes afectaciones en zonas de poblaciones aborígenes que quedaron incomunicadas y que modificaron la vida en estos sectores.