Una fuerte nevada detuvo la actividad durante varias horas del lunes 3 de enero en la capital de Estados Unidos, Washington, además de varias localidades en los estados de Maryland y Virginia.
El temporal provocó el cierre de actividades como escuelas y oficinas federales además de aeropuertos en la región.
Por ejemplo, el aeropuerto Ronald Reagan de Washington registró una acumulación de nieve de al menos 17 centímetros, un nivel no visto desde enero de 2019.
La nevada inició durante las primeras horas del lunes y se prolongó después del mediodía dejando afectaciones severas en la región.
Las autoridades detallaron que más de 448 mil personas de Virginia y más de 79 mil en Maryland quedaron sin electricidad.
Adicional a esto, la nevada incrementó las afectaciones a los vuelos que ya se tenían en el país desde inicios del año.
La Administración Federal de Aviación (FAA) ordenó detener las operaciones en los aeropuertos Ronald Reagan y el Thurgood Mrshall en Baltimore, el cual también incluye a la zona de Washington.
Horas después de la suspensión se realizaron trabajos de deshielo de las pistas en las terminales aéreas con lo que las operaciones comenzaron a regularizarse.
Sin embargo, la nevada no solo trajo este tipo de afectaciones sino que provocó el cierre de módulos de detección de COVID-19 en Washington DC.
Escuelas y oficinas de gobierno también permanecieron cerradas además de que se suspendieron las ruedas de prensa de la Casa Blanca así como el Departamento de Estado.
Se espera que las bajas temperaturas se mantengan durante la semana en la zona.