Aunque muchas personas no lo saben, los troncos de los árboles tienen un latido.
Esto es un fenómeno que se presenta debido a que durante el día se contraen porque al vaciar el agua que se evapora por sus hojas y se expanden durante la noche, cuando sus raíces se llenan de agua.
Sin embargo, un estudio publicado por la revista Nature Communications comprobó que en condiciones normales, los árboles pierden demasiada agua durante el día por la ola de calor que afectó a Europa.
Esta condición de calor provocó que los árboles no fueran capaces de rellenarse de nuevo durante la noche.
Los investigadores determinaron que el latido de los bosques se establece de acuerdo con la cantidad de agua que tienen los árboles en el interior de sus troncos.
En un proceso similar al del corazón y la sangre en el organismo humano, un árbol bombea agua de las raíces hasta la atmósfera para reemplazar el líquido que pierde por transpiración en las hojas.
Sin embargo, los árboles del centro de Europa, bajo condiciones de calor extremo, evaporan más agua durante el día por lo que las reservas que obtienen por las noches no son suficientes.
El estudio también detalló que estas variaciones cambian de acuerdo con las especies de árboles que se analicen.
Como ejemplo señalaron que los robles son más capaces de llenar los troncos durante la noche, pues sus raíces están más adaptadas a la búsqueda de depósitos de agua dentro de la tierra.
La investigación permitirá que se analice la contracción de los troncos de los árboles para encontrar zonas en las que es más probable encontrar dicha afectación.
Con este tipo de resultados, los expertos podrán tener un panorama más amplio de las afectaciones para desarrollar soluciones a ellas.