La serie de tornados que azotó principalmente el estado de Kentucky en Estados Unidos, y que se convirtió en la más mortal en un mes de diciembre en la historia de ese país, dejó daños que aún no han podido cuantifcarse.
De acuerdo con autoridades locales, las tareas de reconstrucción de las comunidades incluyen el restablecimiento del suministro eléctrico, mismo que podría tardar hasta meses en lograrse.
Hasta el momento, se han contabilizado 74 personas muertas por estos tornados, aunque se prevé que el número se incremente hasta 100 debido a la gravedad de la situación.
Para las personas que sobrevivieron, las condiciones no han sido nada sencillas debido a la crisis en la zona pues la zozobra los ha llevado a tener serias dudas sobre si podrán volver a habitarla.
La zona de tormentas incluyó más de 60 informes de tornados en ocho estados del medio oeste y del sur de Estados Unidos, aunque las autoridades no han podido determinar la cantidad de fenómenos que azotaron la región.
El gobernador de Kentucky, Andy Beshear, explicó que más de 500 miembros de la Guardia Nacional acudieron al lugar.
Estos elementos se encargan de realizar las tareas de búsqueda, extracción, rescate, limpieza y rehabilitación de carreteras.
Por su parte, el presidente de Estados Unidos, Joe Biden acudió a la zona del desastre y dio inicio a la evaluación de los daños.
Actualmente, las autoridades estadounidenses implementaron un fondo de ayuda para las víctimas del tornado del oeste de Kentucky que ya ha recaudado más de 9.89 millones de dólares y que permitirá dar atención primaria a quienes más lo necesitan.